
Más allá de la estética o la adaptación a tu figura, existen criterios más objetivos para valorar la calidad de una camisa. Estos detalles hacen que tu prenda favorita dure mucho más tiempo con el aspecto del primer día. Como expertos en el cuidado de tus camisas, te invitamos a saber si una camisa es de buena de calidad con los siguientes trucos:
El tejido de la camisa
Escoge camisas de tejido 100% natural, principalmente de algodón, lino, seda o lana. Debes fijarte en la longitud de la fibra. Cuanto mayor sea, mejor. De acuerdo a este criterio, uno de los mejores algodones es el egipcio. La mezcla con poliéster perjudica la duración y la calidad, provocando en algunos casos deformaciones en la talla y el corte con el tiempo. Como puedes imaginarte, no son las más baratas, pero vale la pena gastar algo más por un buen tejido.
El hilo de la camisa
Las camisas de buena calidad utilizan hilo de dos cabos, aunque algunos hilos son de un cabo. Esto significa que el hilo está formado por dos hilos entrelazados que dan más consistencia al tejido. La máxima calidad se alcanza con el 2×2, en el que se unen trama de hilos horizontales y urdimbre de hilos verticales. En el hilo de la camisa también debe valorarse el grosor, que permitirá una mayor densidad de hilo por pulgada, y por tanto, mayor calidad.
Las costuras de la camisa
Fíjate en la costura lateral de la camisa. Una sola costura en lugar de costura doble es indicativo de calidad, puesto que requiere un trabajo más exigente.
El cuello y los puños de la camisa
Deben ser firmes pero flexibles, con una tela más rígida que la del resto de la camisa. Es mejor que sean entretelados y no termo-fijados para que no se estropeen con los lavados. El cuello debe permitir el uso de ballenas y los puños de las camisas de vestir deben tener forma de cubo o tulipán.
Los pequeños detalles de una camisa
Fíjate en pequeños detalles como contar con un botón en la abertura que va del puño hacia la manga, que los estampados de las diferentes parte de la tela mantengan el patrón del dibujo o que los botones sean de madre perla o nácar en lugar de plástico y estén bien cosidos. Por último, fíjate en el canesú, la parte superior de la espalda, bajo hombros y cuello. Los de buena calidad constan de dos piezas con una orientación diagonal que mejora la movilidad.
Y tú, ¿tienes algún otro truco para identificar una camisa de buena calidad?